Ya no están en la Calle Real Vieja, sino en la Isla de la Palma 21, en unas instalaciones magníficas.
El cordero mantiene la calidad a la que nos tenía acostumbrados y probamos unos boletus con foie de escándalo.
Para finalizar una degustación de whisky escocés de malta, ofrecido por una señorita encantadora.
Nota de Madrid a la Carta: Queremos agradecer a F. Ruiz su comunicación alertándonos del cambio de ubicación del Asador Castilla.