El pasado miércoles tuvo lugar en Santiago de Compostela la gala anual de presentación de la edición 2016 para España y Portugal de la venerada Guía Michelin, que además de un tanto deslucida tampoco destapó grandes novedades o sorpresas relevantes. Como diría un observador experimentado, éste es un año de transición, sin mucho movimiento y en el que Madrid se asienta como nodo o destino gastronómico destacado. Al fin y al cabo no podemos quejarnos, ya que Madrid suma dos nuevas estrellas para llegar a un total de 25, repartidas en 17 restaurantes. Se incorpora a la nómina Lúa de Manuel Domínguez, quien después de atravesar durante estos años el campo minado de la crisis ha logrado alcanzar el cobijo y confort que proporciona la brillante estrella. Enhorabuena a Manuel, un trabajador incansable y una persona estupenda que merece todo lo bueno que le pase. Y la segunda estrella va para Humanes, a casa de los Sandoval, ya que Coque suma su merecida segunda estrella. El resto queda como estaba, y ya es en sí una buena noticia. Como se dice en estos casos, enhorabuena a los premiados y suerte para el resto, a seguir intentándolo y esperar a lo que traiga el año próximo.